Varias líneas de tetrápodos han evolucionado de manera independiente hacia un estilo de vida acuático, lo que ha impulsado modificaciones estructurales y funcionales. Entre estas, los cambios en el tamaño y la posición de los ojos son tendencias clave en dicha transición. Aunque la mayor parte de las ranas y sapos tienen larvas acuáticas, la mayoría de los adultos son terrestres. En contraste, las ranas del género Telmatobius exhiben un espectro único que va desde estilos de vida semiacuáticos hasta estrictamente acuáticos, asociado con la colonización de las tierras altoandinas. Este estudio examina la variación en el tamaño y la posición de los ojos, así como en las proporciones craneales, en dos especies: la semiacuática Telmatobius oxycephalus y la estrictamente acuática T. rubigo. Se tomaron mediciones en estadios postmetamórficos para comparar los grupos y evaluar los patrones alométricos. Telmatobius rubigo, que habita a gran altitud, presenta ojos más pequeños y una posición ocular más dorsal/frontal en comparación con T. oxycephalus. Entre las poblaciones de T. oxycephalus, la población de selva de menor altitud posee ojos más grandes que sus contrapartes de los valles, que habitan a altitudes intermedias. El análisis craneano revela que T. rubigo tiene órbitas más pequeñas y cápsulas óticas más grandes, mientras que T. oxycephalus muestra el patrón opuesto. Estos hallazgos sugieren que el tamaño ocular reducido y la posición más frontal/dorsal de los ojos evolucionaron como respuesta a un estilo de vida acuático en altitudes elevadas. Este patrón es paralelo al observado en las ranas pipidas altamente acuáticas, que se adaptaron a hábitats acuáticos durante el Cretácico. En contraste, la especialización de Telmatobius a ambientes acuáticos es relativamente reciente y está asociada a la colonización de los Andes, lo que ofrece una oportunidad única para estudiar una radiación adaptativa en un contexto evolutivo moderno.

 

Perfil altitudinal esquemático que muestra los principales ambientes y los registros de precipitaciones a lo largo de un transecto de 200 km (latitud 23,3° S) que conecta tres de las localidades donde habitan las ranas: Telmatobius oxycephalus de selva (punto verde), T. oxycephalus de valle (punto naranja) y T. rubigo (punto amarillo). La variación en el tamaño y la posición de los ojos está relacionada con este gradiente ecológico y con los distintos estilos de vida de las ranas.

 

Autor:

José Sebastián BarrionuevoJosé Sebastián Barrionuevo
Investigador Adjunto
CONICET
FML
Herpetología