Descubren nueva especie de pez en humedales de Chaco
Descubren nueva especie de pez en humedales de Chaco

Un grupo de investigadores, entre los que se encuentra el lilloano Guillermo Terán, del Instituto de Vertebrados, participó de la descripción de Titanolebias calvinoi, un nuevo pez killi gigante. Detalles de la especie y un hallazgo trascendente para la ciencia y la biodiversidad argentina.
Un hallazgo extraordinario acaba de ser publicado en la revista científica Zoologischer Anzeiger: el descubrimiento de una nueva especie de pez killi gigante, nominada Titanolebias calvinoi -dedicada a Pablo Calviño, prominente naturalista argentino-, en los humedales temporarios del Parque Nacional Chaco. El descubrimiento fue realizado por científicos de distintas instituciones públicas de Argentina (FML, CONICET, UNLP, CEPAVE) y un investigador de Uruguay. El Dr. Guillermo Terán, especialista de la sección Ictiología del Instituto de Vertebrados de la Fundación Miguel Lillo e investigador en la Unidad Ejecutora Lillo (FML-CONICET), fue parte de este inmenso hallazgo para la ciencia.
Este trabajo científico aporta nuevos conocimientos sobre la biodiversidad de una de las regiones más amenazadas de Argentina y destaca la importancia de conservar los ecosistemas de humedales para proteger a especies únicas y altamente especializadas. El descubrimiento de Titanolebias calvinoi revela la riqueza oculta de los humedales chaqueños y refuerza la necesidad urgente de conservar estos ecosistemas frágiles.
“Adaptado a ambientes efímeros, este pez completa su ciclo de vida en apenas unas semanas. Justamente por ese rasgo tan singular, algunas especies de killis se utilizan como modelos en estudios sobre envejecimiento celular. Pero incluso si no tuvieran aplicaciones inmediatas, conocerlas seguiría siendo valioso. Necesitamos dejar de medir toda la biodiversidad por su utilidad práctica. Conocer, estudiar y describir nuestras especies es valioso en sí mismo: cada país debe cuidar su legado natural”, sentenció el científico lilloano.
Por otra parte, añadió que, historicamente, desde la FML se viene recorriendo ese camino desde hace décadas, con un compromiso sostenido con la taxonomía y la divulgación del conocimiento. “El descubrimiento de T. calvinoi es un ejemplo concreto de lo que puede lograrse cuando el Estado invierte en ciencia y se promueven enfoques colaborativos. En este caso, gracias al trabajo conjunto entre investigadores y personal de Parques Nacionales, seguimos ampliando el mapa de lo que todavía nos queda por descubrir”, concluyó Terán.
El estudio fue liderado por Felipe Alonso, investigador del Instituto de Bio y Geociencias del NOA (IBIGEO-CONICET) y de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Salta, y Guillermo Enrique Terán (Fundación Miguel Lillo – UEL -CONICET, Tucumán); participaron también Wilson Sebastián Serra (Museo Nacional de Historia Natural, Uruguay), Marcos Martin Waldbillig (CONICET–Universidad de Buenos Aires), Baltazar Bugeau (UEL-CONICET) Martín Miguel Montes y Marina Ibañez Shibamukuro (CEPAVE-Conicet, La Plata).
“Encontrar un pez killi gigante oculto en los humedales del Chaco nos tomó por sorpresa y nos demuestra que en lugares poco explorados aún hay maravillas por descubrir. No todos los días se descubre una especie nueva; mucho menos un pez de este porte viviendo en un charco temporario”, manifestó Alonso, líder del hallazgo.
Los killis estacionales (orden Cyprinodontiformes, familia Rivulidae) son peces extraordinarios, conocidos por tener especies que viven en ambientes acuáticos efímeros que se secan completamente de manera periódica. Estos ambientes extremos imponen desafíos únicos a los organismos que los
habitan. Frente a estas condiciones, presentan un conjunto notable de adaptaciones en su historia de vida como tener un crecimiento acelerado, madurez sexual temprana y huevos resistentes a la
desecación que pueden ingresar en un estado llamado diapausa, caracterizado por la suspensión del desarrollo, que se reactiva en respuesta a cambios ambientales. Estas características les permiten a los killis habitar ambientes con fluctuaciones extremas en la disponibilidad de agua y temperatura.
Sin embargo, esta alta especialización también los hace extremadamente vulnerables, ya que habitan casi exclusivamente ambientes muy específicos: los humedales temporarios.
Estos sistemas, de pequeño tamaño y escasa profundidad, son particularmente sensibles a las actividades humanas, como la agricultura, la deforestación, la canalización y modificación de cursos de agua, el cambio climático y la urbanización.